¿En qué creemos los argentinos? Primer informe

Te presentamos el primer informe de Creencias Sociales, un programa del observatorio Pulsar.UBA que tiene por objetivo comprender de manera sistemática los valores sociales y  las cosmovisiones de los argentinos referidos a temas culturales, científicos, religiosos y políticos de relevancia pública. Lo hacemos sin un foco electoralista, con datos, precisión y discusión.

¿Qué hicimos? Una encuesta nacional de 1.000 casos a argentinos y argentinas mayores de 18 años en torno a siete dimensiones de análisis: 1)  la democracia, 2) la política y los consensos, 3) El rol del Estado, 4) las libertades y la igualdad, 5) el orden público, 6) las relaciones internacionales y 7) distintas agendas de debate público. En este primer informe nos concentramos en la primera y en la segunda dimensión e iremos publicando el resto de los datos próximamente.

¿Qué nos encontramos? Cuatro hallazgos principales que no solo nos dan una foto del día, si no que nos permite reflexionar sobre la Argentina que hemos construido en estos 40 años de democracia sin interrupciones.

Primer hallazgo: la democracia sigue siendo el mayor de los consensos entre los argentinos/as. En tiempos donde la polarización nos tamiza todo y los acuerdos políticos no tienen conducción, hay un 70% de los entrevistados que responde con convicciones y compromisos democráticos. La sociedad quiere democracia.

Este consenso está presente en los espacios políticos mayoritarios, incluso preguntando qué debe ocurrir cuando un gobierno democrático no da soluciones: si tiene que terminar su mandato o debe ser reemplazado en el ínterin. La excepción puede encontrarse en los votantes del espacio libertario; más de la mitad de ellos optan por la segunda alternativa. Es un primer llamado de atención.

Ahondamos sobre este punto y construimos “perfiles de demócratas” en función de múltiples variables. Los clasificamos como demócratas puros, demócratas pragmáticos e indiferentes. Esta es la distribución que encontramos.

Este punto nos llevó a nuestro segundo hallazgo: queremos una democracia, pero no la que tenemos. Los argentinos somos profesores exigentes y el sistema político no está dando las soluciones esperadas. Eso repercute en los valores democráticos de un sector de la sociedad. El choque entre la expectativa y la realidad tiene sus costos. Hay una democracia con la que soñamos y otra que es la que tenemos.

Nuestro tercer hallazgo puede parecer contraintuitvo: los argentinos/as  estamos interesados en política. Es impreciso decir que la apatía y el desinterés nos gobiernan. Hay interés, suficiente. Pero no es mayoritario. Eso hace que no necesariamente haya movilización por la política y para la política. Interesados sí, pero no siempre comprometidos.

La apatía política corroe incluso los valores democráticos, más de un tercio de quienes no están interesados en política son oscilantes cuando las tensiones afloran, lo que hace que puedan tolerar excepcionalidades a la democracia.

Finalmente, nuestro cuarto hallazgo es sobre el impacto de la política en las relaciones personales de los argentinos/as. Casi la mitad de los entrevistados condiciona sus relaciones personales a las diferencias políticas. A partir de dos preguntas del cuestionario construimos una variable que denominamos “polarización y relaciones personales”. La misma tiene por objetivo intentar capturar cómo las diferencias políticas pueden condicionar nuestras relaciones personales.

Esto indica que si bien hay valores y consensos compartidos en la sociedad, las distintas visiones sobre la política tienen una incidencia significativa en la forma en que nos relacionamos. No tanto en los dos espacios mayoritarios que gobiernan la Argentina, pero sí entre los libertarios. Este punto coincide con el resaltado anteriormente. No es para alarmarse pero tampoco para subestimar.

A 40 años de democracia, la convivencia política aún está en proceso de maduración. La polarización no sólo limita los consensos políticos a nivel dirigencial sino también las relaciones de la sociedad en la vida cotidiana. Nos queda camino para recorrer, mejorar y trabajar como comunidad política. Esta breve presentación es una síntesis del primer informe, que podes descargar y leer completo. Te invitamos a leer el documento, a compartirlo, discutirlo y, por qué no, escribirnos.